pensamientos

Último de mayo

Extraño esa nada que teníamos, pero que parecia existir y hacía querernos consumir en fuego todo el tiempo. Se que tratas de no verme porque yo te lo pedí, porque tus formas no me alcanzan, ni me hacen feliz. Pero te extraño y en mi mente solo retumba “ojalá”.

Ojalá me desearas como yo a ti, ojalá sintieras esa fuerza interna palpitante, que me llenaba toda al estar junto a ti. Porque si sintieras esto que siento yo por ti, no dudarías en estar acá y no allí.

Y yo te quiero, del querer bonito, del amor derecho, sin tapujos ni restricción. Cruel fuiste conmigo al dar esperanza donde nunca debió haber. Porque loca, rota, malhecha y defectuosa que soy, me hiciste pensar inútilmente que en el mundo había alguien que veía belleza en el desastre que soy.

Y te extraño a todas horas, te sueño, te vivo, te muero, te lloro, me siento ridícula por la manera en que te añoro. Hay días como hoy, que siento que ya no puedo más, todo fue fantasía, producto de mi hambre de amar.

En los reales hechos tu no fuiste bueno, fui solo parte de tus ansiados momentos para olvidar tu insoportable soledad, porque acompañado te muestras, pero aunque no lo admitas, en melancolía eterna estás.

Te veo atrapado, deseoso de más, conmigo quizás eras libre y eso es lo que me mantiene bajo tu mirada esta noche y todas las demás.

Dejar un comentario